Un lugar mágico y desconocido. En la misma cívica a pie de carretera, la conocida como la casa del cura. Una casa en la montaña, enorme y privada aunque abandonada y a veces abierta. Hay un bar para los pescadores y si se conoce, tras la maleza pegada a la casa, una cascada y grutas. Lo más sorprendente entre brihuega y cívica la antiguamente conocida como la huerta del cojo. Hace meses era casi imposible localizar ya este mágico paraje hoy totalmente abandonado pero que en tiempos fue un lujo de cascadas, grutas, casitas…
Un lugar mágico y desconocido. En la misma cívica a pie de carretera, la conocida como la casa del cura. Una casa en la montaña, enorme y privada aunque abandonada y a veces abierta. Hay un bar para los pescadores y si se conoce, tras la maleza pegada a la casa, una cascada y grutas. Lo más sorprendente entre brihuega y cívica la antiguamente conocida como la huerta del cojo. Hace meses era casi imposible localizar ya este mágico paraje hoy totalmente abandonado pero que en tiempos fue un lujo de cascadas, grutas, casitas…