Más que una comida lo han convertido en una experiencia. Al llegar nos invitaron a un aperitivo; fantásticas anchoas sobadas en la casa y un rosado y acto seguido te muestran el Palacio con la pequeña panadería y la bodega. Es breve pero se agradece. Igual que la visita de Jesús a las mesas, breve pero un detalle. Comimos el menú memoria a tiempo; 57€ sólo de lunes a viernes. Teóricamente es como el memoria pero sin el entrante. Pusieron 2 snacks: tortilla de Villaverde fantástica y otro bocadito. Comimos de principal pichón y sobre todo un mero espectacular y los postres hojaldre y chocolate con aguacate.. me quedo con este. Buena experiencia, muy buena comida y servicio excelente, redondean la experiencia regalando un trozo del pan que hacen al salir. Dos peros para un 2 estrellas quizás esperaría un punto adicional de sorpresa o emoción como la primera vez que fuimos y añadiría a este menú algo más de comida puesto que aunque sea una oferta de diario, entre agua (4,5€), una copa de vino (8€) y café la cuenta para dos ascendió a casi 140€, por ese precio no te puedes ir con la idea de haber comido poco independientemente de que nos quedaríamos bien de comida. La bodega muy subido el precio, los petit foirs espectaculares.
Más que una comida lo han convertido en una experiencia. Al llegar nos invitaron a un aperitivo; fantásticas anchoas sobadas en la casa y un rosado y acto seguido te muestran el Palacio con la pequeña panadería y la bodega. Es breve pero se agradece. Igual que la visita de Jesús a las mesas, breve pero un detalle. Comimos el menú memoria a tiempo; 57€ sólo de lunes a viernes. Teóricamente es como el memoria pero sin el entrante. Pusieron 2 snacks: tortilla de Villaverde fantástica y otro bocadito. Comimos de principal pichón y sobre todo un mero espectacular y los postres hojaldre y chocolate con aguacate.. me quedo con este. Buena experiencia, muy buena comida y servicio excelente, redondean la experiencia regalando un trozo del pan que hacen al salir. Dos peros para un 2 estrellas quizás esperaría un punto adicional de sorpresa o emoción como la primera vez que fuimos y añadiría a este menú algo más de comida puesto que aunque sea una oferta de diario, entre agua (4,5€), una copa de vino (8€) y café la cuenta para dos ascendió a casi 140€, por ese precio no te puedes ir con la idea de haber comido poco independientemente de que nos quedaríamos bien de comida. La bodega muy subido el precio, los petit foirs espectaculares.